¡Qué bonita es la diversidad! ¡Qué bonito es saber valorarlo!
Día 40 de confinamiento, día soleado, día de Sant Jordi... ¡que se note! Os voy a dejar por aquí abajo una poesía que encontré sobre la dislexia que espero que abra los ojos a las personas que duden acerca de qué es este trastorno del aprendizaje que hemos ido descubriendo en entradas anteriores.
“DISLEXIA, NI DESPISTE NI PEREZA”
Dificultad en la asociación entre letra y sonido.
Necesitan mayor esfuerzo para automatizar la
relación entre los estímulos visuales (grafema)
con los estímulos auditivos (fonema). Necesitan
mayor apoyo y refuerzo externo para lograrlo.
Lectura con errores, lenta respecto a su edad,
trabajosa en particular con las palabras largas
o poco frecuentes. Comete sustituciones,
omisiones, adiciones, intercambios, etc.
Las dificultades a nivel de letras y palabras
repercuten en todos los procesos de la lectura,
en los niveles de oración y texto, tanto en la
fluidez como en la comprensión lectora.
Su atención se focaliza en descifrar las palabras
no pudiendo prestar atención a las frases, signos
de puntuación, interrogación, etc. Dificultades
Algunos leen despacio para leer bien (lentos
pero precisos); otros intentan leer con velocidad
llegando a inventar palabras (“electrodo” por
“electorado”). Esas dos estrategias de lectura
reflejan el uso predominante de una de las vías,
la subléxica (usada por los niños pequeños) o la
léxica (por los mayores).
Los niños con dislexia muestran problemas de
comprensión lectora, entendiendo el texto si lo
oyen, lo que les conduce a un rendimiento
escolar bajo.
Las características de los niños con dislexia
también dependen de los idiomas en los que
tienen que aprender a leer.
Fuente: Dislexia, ni despiste ni pereza.
Autores: Fernando Cuetos, Luz Rello y Manuel Soriano.
Autores: Fernando Cuetos, Luz Rello y Manuel Soriano.